El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador descartó presentar una iniciativa que reforme el Poder Judicial, pues asegura que este tipo de cambios deben generarse por los propios jueces y ministros.
“Sostenemos que esa reforma la tienen que impulsar los mismos integrantes del Poder Judicial y no queremos dar motivos para que los adversarios, los conservadores, los corruptos vayan a decir que queremos desaparecer al Poder Judicial”, explicó el mandatario.
Señaló que prefiere mantenerse lejos de toda polémica sobre una posible injerencia hacia un poder autónomo como lo es el Judicial; sin embargo, señaló que se debe “purificar” el sector judicial.
En este sentido señaló que debe mejorar el funcionamiento del Consejo de la Judicatura: “díganme si hay un juez en la cárcel, si hay un magistrado en la cárcel. No, mucho menos un ministro, es como el castillo de la pureza. Entonces ellos deben asumir su responsabilidad”.
De igual manera enfatizó en que los jueces deben de demostrar que son un poder autónomo que debe de tener la arrogancia de sentirse libres, “pero no con desplantes y con demagogia”.
Incluso, el presidente señaló que los magistrados son muy probablemente independientes del pueblo, “pero no del poder económico, de la oligarquía, de los abogados defensores de los corruptos, de los factureros”.
Ve inviable naviera
También señaló que en estos momentos de si gobierno no es factible crear nuevos proyectos que no podrá acabar al finalizar su sexenio, como lo es la idea de crear una naviera al servicio del Estado.
“Va ser muy difícil que nosotros creemos un plan. Ya no estamos comenzando nada que no podamos terminar. Tenemos el tiempo encima y tenemos obras que vamos a concluir este año y a más tardar el primer trimestre del año próximo. En tiempo nos queda un año. No quiero comenzar nada que no se concluya, que no se termine, no quiero dejar un tiradero de obras inconclusas”, señaló.
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