El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador insistió en que China introduce la mayor cantidad de fentanilo de manera directa a Estados Unidos y Canadá y sostuvo que las materias primas para producirlo llegan a laboratorios clandestinos mexicanos desde ese país.
“El fentanilo que viene de Asia y entra por México, pero también llega de manera directa. Es una materia prima que se trae de Asia, esa materia prima lo que se hace aquí y no es México el país que más introduce fentanilo a Estados Unidos, llega de manera directa a Estados Unidos y a Canadá que lo que llega a México”, dijo el presidente al señalar de manera irónica que en ese país no hay cárteles de drogas, narcotráfico o laboratorios para producirlo.
“Allá no hay carteles, es por telepatía que se distribuye, no hay allá narcotráfico ni laboratorios. No hay mafias allá” y señaló que se ha detectado que el fentanilo que sale de México a esos dos países va en pastillas de color azul, pero en las calles de Estados Unidos y Canadá se han encontrado de muy diversos colores.
Desde Palacio Nacional insistió en que México mantendrá la cooperación con Estados Unidos para frenar el tráfico de fentanilo y por eso insistió en su propuesta para suplir el uso de ese químico en los medicamentos. Destacó que investigadores del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) ya trabajan en ello y rechazó las acusaciones de querer prohibir medicamentos para enfermos terminales.
“Estoy planteando que los médicos, científicos muy conservadores están en contra de nosotros, que haya un analgésico que pueda sustituirlo para prohibirlo. Ya están científicos de Conacyt estudiando, pero ayer en las redes politiqueros y gente muy conservadora habla que no quiero que enfermos terminales tengan ninguna medicina para que pueda quitarles el dolor. Son muy perversos”, denunció.
Dijo entender la demanda del gobierno norteamericano para emprender acciones que frenen el tráfico de este químico letal, pero cuestionó los intereses de algunos grupos como los legisladores republicanos que solo cuestionan a México, pero no han hecho nada en defensa de la juventud norteamericana.
“Los entendemos perfectamente bien y por eso, ayudamos y vamos a cooperar en todo lo que podamos para que no llegue no solo el fentanilo, ninguna droga. Que no haya consumo ni que haya tráfico, ese es nuestro compromiso y lo estamos haciendo como nunca. Por eso es muy irresponsable que, con propósitos propagandísticos, es canallesco decir que la culpa es de México”, agregó.
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