Nombrar las diferentes maneras en la que las personas atraviesan este mundo es una forma de resistencia para las poblaciones vulnerables y verles ocupando espacios que históricamente les han negado es inspiración de lucha.
Dibujar ha sido para Azul López, ilustradora y escritora trans mexicana, una forma de expresar su visión del mundo e invitar a quienes encuentran sus ilustraciones en libros a detenerse a mirar y reflexionar. Aunque las librerías catalogan su trabajo como “infantil”, ella asegura que es también para todas las personas que quieran encontrarse entre las páginas.
Azul le dio vida a un gigantesco ser a través de un dibujo que más tarde la conecto con Alfonso Ochoa, y éste decidió ponerle palabras a aquella ilustración que lo impactó. El trabajo que lograron en conjunto se convirtió en un libro llamado Gigante a la orilla.
Este libro trata del miedo y como si se tratara de una paradoja, Azul decidió concursar con él acompañada de ese mismo sentimiento. Como buen gigante, dio pasos grandes que cruzaron el mar, llevándola a ganar el 12° Premio Internacional de Ilustración de la Feria del Libro Infantil de Bolonia en 2022.
“En algún momento de nuestra vida, el mundo nos dice que no somos suficientes, sin embargo, a las personas que pertenecemos a la comunidad LGBTTTIQ+ se nos enseña, entre otras cosas, que no merecemos vivir”, comparte la ilustradora.
López se convirtió en la primera mujer trans, así como la primera latinoamericana, en lograr este premio. Esto dejó, y sigue dejando, un precedente para las población LGBTTTIQ+.
“Cuando supe del premio fue un gran golpe, un golpe muy hermoso, quiero decir (...) Con el pasar de los meses fui entendiendo que esto implicaba también un gran progreso, no sólo dentro de mi carrera, sino dentro de la sociedad, dentro del grupo de personas que nos dedicamos a los libros, dentro del grupo de personas como yo”.
¿Por qué es importante la visibilizar de la diversidad?
En el recorrido de Azul con sus dibujos, no hubo otras mujeres trans que pudiera ver hacer lo mismo que ella y que le recordaran que esos también son sus espacios.
“Las historias de personas trans no siempre son contadas por nosotras. Las historias de personas disidentes no siempre son vistas bien, sino que son señaladas y vistas como una historia de dolor, una historia de fracaso, una historia de enfermedad y de muerte”.
- Comunidad
La visibilidad de la diversidad de género permite que quienes son cisgénero conozcan otras realidades y puedan ser más empáticos. En el caso de las personas trans les hace saber que merecen ser libres y que hay más gente como ellas y ellos ocupando cualquier espacio.
Las infancias trans ahora podrán ver a una escritora e ilustradora haciendo libros, recibiendo reconocimientos y sabrán, que si lo desean, pueden serlo también.
“A personas trans pequeñitas, muy jóvenes, decirles que ellas también pueden ocupar esos espacios. Que ser ellas mismas no está mal, que ser ellas mismas no las va a encerrar en una jaula, que por ser una persona trans, creemos que esta jaula en la que debemos vivir, sino que merecemos ser libres, que merecemos ocupar estos espacios también”.
En sus próximos proyectos, la mexicana podrá ver su nombre correcto plasmado en ellos por primera vez, lo que trae consigo una emoción especial al saber lo difícil que fueron los procesos legales, sin embargo, recuerda que el ámbito literario la abrazó y cobijó en este camino.
“Creo que a veces el miedo y las experiencias nos hacen imaginar que la oscuridad es más negra de lo que realmente lo puede ser, especialmente cuando tenemos ya tanta luz a nuestro alcance”, reflexiona Azul.
Entre sus obras literarias podemos encontrar Volver a mirar, una reflexión sobre la apreciación de la vida dentro del ritmo ajetreado de la cotidianidad. Las ilustraciones de este libro detuvieron a muchas personas en Bolonia en 2023 mientras eran exhibidas en la Feria del Libro Infantil… tal como Azul lo deseaba.
ZP