La Comisión Estatal del Agua (Ceat), aseguró que, en Monterrey, Nuevo León hay garantía, y abasto suficiente de este servicio a diferencia de Tamaulipas.
Esto es posible a través de las presas La Boca, el Cuchillo, y La Libertad, aseguró el presidente de esta comisión, Salvador Treviño Zapata, además de sus pozos de almacenamiento que resguardan un promedio de 400 millones de metros cúbicos, cuando solo requiere de utilizar 220 millones de metros cúbicos anuales.
"Monterrey muy seguramente va a estar revisando cómo garantizar el vital líquido en su metrópoli y ahorita tiene las condiciones a través de la presa La Boca, la misma presa El Cuchillo que es una presa complementaria, cuando ellos tiene El Cerro Prieto, y pozos profundos, la presa La Libertad que son volúmenes importantes, y en los almacenamientos que cuentan con concesiones de hasta llegar a 400 millones de metros cúbicos, de los cuales sus necesidades es de alrededor de 220 millones de metros cúbicos anuales", dijo.
Detalló que, como todo, la falta de lluvia trae bajos niveles de agua, que solo mejorarán cuando se presenten las condiciones.
"Hay una baja, dado a la sequía que estamos padeciendo toda la región, por lo que presas están en niveles bajos, ya lo hemos visto, el mismo caso sucede con Tamaulipas, si me voy a la Vicente Guerrero, estamos abajo del 32%, si nos vamos a La Falcón que surte a todo el norte del estado, está al 16%", refirió.
Asimismo, reiteró que Nuevo León tiene otro volumen concesionado por parte de la Conagua por el acueducto del proyecto Monterrey VI, que no se construyó, y la concesión que tienen respecto a la presa La Libertad.
"Si sumamos a todo lo que tienen concesionado están muy por encima de las necesidades que tiene Monterrey, yo creo que lo que hay que trabajar como región, qué hay que hacer en conjunto para cumplir los acuerdos", instó.
Treviño Zapata, dijo que la presa El Cuchillo está por arriba de los 300 millones de metros cúbicos y que otra serie de condiciones que no hay que olvidar es la cuenca del río San Juan, una de las cuencas en veda, que ya no puede dar agua a nadie, porque los agricultores de ese distrito la utilizan para el uso agrícola y que prácticamente abastece con su producción.
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