Mi deseo es que ya no se use el petróleo y se consolide el uso de autos eléctricos porque será bueno para la salud, dijo el presidente Andrés Manuel López Obrador, sin embargo, aseguró que este cambio tomará tiempo.
El mandatario señaló que su administración le atinó a la política energética por priorizar la rehabilitación de las seis refinerías existentes, construir Dos Bocas y comprar Deer Park porque de esta manera se ha podido enfrentar la crisis actual.
"Y de repente porque se equivocaron los de Shell como se equivocaron muchos expertos, se acuerdan que decían también que ya para qué el petróleo, que ya venían los carros eléctricos, yo deseo que lleguen los carros eléctricos y que ya no se use el petróleo porque eso va a ser bueno para la salud, pero eso lleva tiempo".
Declaró que en el caso de los combustibles se pensó que llegarían las baterías, "ya para qué el petróleo y nosotros ahí le atinamos porque dijimos no, va a tardar y se invirtió en las refinerías, les comentaba que Shell puso en venta sus refinerías, una buena cantidad, no todas, por eso es la crisis porque se abandonaron las refinerías por lo mismo", expresó.
Frente a decenas de simpatizantes que asistieron al evento, López Obrador comentó que el 1 de julio se va a inaugurar la fase de prueba de la refinería de Dos Bocas en Tabasco y están en marcha los proyectos de construcción de dos coquizadoras en Tula, Hidalgo, y Salina Cruz, Oaxaca.
Con estas medidas aseguró que se va a dejar de comprar gasolina en el extranjero y México será autosuficiente en materia energética.
"Con esa política neoliberal en 40 años no se hizo una nueva refinería en el país, increíble. Qué hicimos desde que llegamos, rehabilitar las que nos dejaron, casi convertidas en chatarra, fierros viejos, tenían una capacidad de producción de petróleo del 30 por ciento, empezamos a invertir desde 2019, llevamos como 34 mil millones invertidos en la rehabilitación de estas refinerías", agregó.
López Obrador concluyó su gira de fin de semana en Acapulco inaugurando el libramiento poniente, el cual se inició desde 2014 y no se había podido inaugurar por la oposición de grupos.
Incluso, esta obra dejó cinco personas muertas debido a los conflictos por el territorio y la presencia de criminales.
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