México como otros países en el mundo echan mano de diferentes modelos para impulsar su economía, entre ellas la creación de empresas que proveen de servicios públicos a los habitantes, pero también que pueden vender algún producto o servicio, ya sea de manera interna o a otros países.
Los entes encargados de realizar esto se conocen como empresas productivas de Estado o bien, empresas públicas de Estado. Aquí te explicamos la diferencia entre cada una de ellas.
Empresas productivas del Estado
Un claro ejemplo de una empresa productiva de estado es Petróleos Mexicanos (Pemex), de acuerdo con la explicación de la misma, son entes de propiedad exclusiva del Gobierno Federal, dotadas de un marco jurídico propio, acorde con sus fines de carácter productivo, promoviendo su manejo ágil, eficiente y transparente.
Algunas de sus características son:
- Objetivo comercial e industrial
- Generación de valor económico
- Operación, evaluación y vigilancia atendiendo a sus objetivos económicos Autonomía de gestión del Consejo de Administración
- Autonomía financiera, presupuestal, de contratación y administrativa
- Régimen especial en materia de Empresas Productivas Subsidiarias y filiales; Remuneraciones; adquisiciones, arrendamientos, obras y servicios; Bienes; Responsabilidades; Dividendo Estatal; Presupuesto, y Deuda
Empresas públicas del Estado
A diferencia de las empresas productivas, las compañías públicas del Estado son los entes productores o comercializadores de bienes y servicios que tengan por parte del sector público, la propiedad total o mayoritaria directa o indirectamente, asegura la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
- Nacional
Un ejemplo de esta es la Comisión Federal de Electricidad (CFE), es decir, es un “gigante” en número de empleados y activos, sin importar duplicidad de funciones y activos improductivos; la empresa productiva del Estado trata de reducir su tamaño en busca de rentabilidad.
La empresa pública es, por lo general, poco eficiente; la empresa productiva del Estado trata de ser más eficiente para no ser una carga para el estado y el país.
De acuerdo con la Universidad Nacional Autónoma (UNAM), el régimen de las empresas públicas se basa en tres figuras siendo en “primer lugar las compañías que estén legalmente constituidas como organismos públicos descentralizados; en segundo lugar, se encuentran las sociedades mercantiles públicas o empresas de participación estatal mayoritaria; finalmente los fideicomisos públicos”.
En relación a sus características jurídicas se detalló que son creadas por el Estado, tienen personalidad jurídica propia o son unidades económicas, tienen un ámbito territorial determinado, son órganos de representación y se rigen por el derecho público en sus relaciones con la administración central y por el derecho privado en sus relaciones con particulares.
En torno a sus características político- administrativas, su patrimonio es estatal por lo que el estado puede disponer de sus fondos, tienen la capacidad de administrarse por sí mismas y sus relaciones con el ejecutivo federal son realizadas por la secretaría de estado o departamento administrativo que determine el presidente de la república.
KGA