Un Tribunal Federal desechó un amparo directo promovido por la asesina serial Juana Barraza Samperio, La Mataviejitas, con el cual pretendía impugnar la sentencia de 759 años de cárcel y una multa de 791 mil 382 pesos que le fue impuesta por ser penalmente responsable del delito de homicidio contra 16 mujeres de la tercera edad, así como de 12 robos a casa habitación.
Los magistrados del Octavo Tribunal Colegiado en Materia Penal señalaron que el recurso de la quejosa es extemporáneo. Explicaron que la Novena Sala Penal del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México ratificó la sentencia el 28 de noviembre de 2008, y de acuerdo con la Ley de Amparo, el juicio de amparo directo contra una pena de prisión puede interponerse en un plazo de hasta ocho años y en caso de que la sentencia hubiese sido dictada antes del tres de abril de dos mil trece, el plazo debe computarse a partir de esa fecha.
Por lo tanto, el plazo actualizado de ocho años, con abono de los días que el Tribunal Colegiado suspendió sus labores por la pandemia, feneció el 3 de octubre de 2021.
El amparo de Juana Barraza fue presentado el 5 de abril este año, por esto se desechó. Ante esta situación, La Mataviejitas ya interpuso un recurso de reclamación, el cual será analizado por el mismo Tribunal Colegiado.
En 2008, el juez 67 de lo Penal, Enrique Juárez Saavedra, condenó a Juana Barraza, quien tras escuchar la sentencia exclamó: ¡Que Dios los perdone y que a mí no me olvide! La mujer dijo que ella sólo era culpable del crimen de su patrona, Ana María de los Reyes Alfaro.
Con el cabello hasta los hombros, teñido de pelirrojo, y con anteojos, Juana aguardó tranquilamente la resolución del impartidor de justicia, que era leída por el secretario de acuerdos, Adolfo Rodríguez Campuzano. Al concluir la lectura, la tranquilidad de La Mataviejitas desapareció.
Y manifestó: “No, no voy a firmar nada, porque no estoy de acuerdo con la condena…Vamos a apelar, porque no estoy de acuerdo, y ahí está Dios de testigo…él sabe que no soy yo, porque siguen matando a señoras…pero que Dios los perdone y a mí que no me olvide”.
Barraza Samperio puso en duda el trabajo de la entonces Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal, mismo que la llevó a la cárcel tras ser detenida el 26 de enero de 2006, en la Primera Sección de la Colonia Moctezuma, en la ahora alcaldía Venustiano Carranza, en la Ciudad de México, minutos después de que asesinó a Ana María de Los Reyes.
Al término de la audiencia Juana Barraza expresó a los medios de comunicación que era una injusticia la pena dictada, porque sólo cometió uno y no 15 homicidios más como la responsabilizó la autoridad.
Cuando se le preguntó por qué aceptó los demás homicidios, la mujer respondió: “Sí mi hicieron hablar, como no lo voy a aceptar; primero por la situación de mis hijos, sino, no les hubiera firmado nada, y eso no se vale.”
También aprovechó para defender a las mujeres de la tercera edad que permanecían recluidas en el penal de Santa Martha Acatitla. Aseguró que se estaba cometiendo una injusticia contra ellas, porque ese no un lugar para esas mujeres.
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