En el Día de Muertos, cada detalle que compone la ofrenda tiene un simbolismo único, y uno de los elementos más importantes son las velas y veladoras.
No solo iluminan el altar, sino que también están llenas de significado al conectar a los vivos con sus seres queridos fallecidos y representando la luz que guía a las almas en su viaje desde el más allá.
Si alguna vez te preguntaste el significado de las velas en la ofrenda de Día de Muertos, en TELEDIARIO te decimos qué simbolizan, así como la explicación de otros elementos que componen estos altares.
Velas en ofrenda de Día de Muertos: las luces que sirven de guía para quienes ya no están
Las velas en las ofrendas tienen una función clave: servir como faro para las almas de los difuntos.
Se cree que, al encenderlas, las llamas ayudan a que los espíritus encuentren su camino de regreso al mundo de los vivos y puedan reunirse, aunque solo sea por un breve momento, con sus familiares.
Las velas no solo marcan el camino de regreso, sino que también simbolizan la esperanza y el deseo de que los seres queridos encuentren paz en su tránsito espiritual.
Además, en muchas comunidades el número de veladoras que se coloca en la ofrenda tiene una relación directa con los difuntos que se desean honrar.
Cada vela es una representación de una persona en particular, como un símbolo de que las almas no son olvidadas, sino esperadas con luz y cariño.
Ofrendas de fe y esperanza reflejadas en la luz de velas
Las velas también encarnan la fe y la esperanza, dos valores esenciales en la celebración del Día de Muertos.
La luz de las velas son una guía para las almas y el anhelo de las familias de que sus difuntos estén protegidos y encuentren consuelo en su viaje espiritual.
Esta luz es un recordatorio de que si bien la muerte es inevitable, el vínculo con los seres queridos perdura por siempre.
El color de las velas también tiene un significado importante. Por ejemplo, las velas moradas suelen representar el duelo, y es común verlas colocadas en forma de cruz, simbolizando los cuatro puntos cardinales para orientar a las almas en su trayecto hacia el altar.
¿Qué significan los elementos de la ofrenda de Día de Muertos?
Además de las velas, la ofrenda incluye otros elementos igualmente significativos. El agua, por ejemplo, se ofrece para que las almas apaguen su sed tras su largo viaje. La sal, símbolo de purificación, protege al cuerpo en su ida y vuelta hacia el más allá.
Las flores, en particular el cempasúchil, adornan el altar con su color vibrante y aroma, guiando a las almas con su fragancia. Por su parte, el copal y el incienso se utilizan para limpiar el ambiente de espíritus negativos, permitiendo que las almas entren en el hogar sin obstáculos.
Por último, el pan de muerto, que representa el "Cuerpo de Cristo", es una ofrenda fraternal que no puede faltar en ninguna ofrenda.
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