Narcomenudistas detenidos en CdMx confiesan recibir protección y ayuda de policías de investigación

Miembros del grupo delictivo de Los Barrabas fueron detenidos en la Ciudad de México y trasladados ante la Fiscalía General de Justicia capitalina, donde los presuntos criminales confesaron que fueron apoyados por elementos de la Policía de Investigación (PDI) con protección.

De acuerdo con las confesiones de los miembros de Los Barrabas, estos también fueron ayudados por miembros de la PDI para trasladar drogas desde el poblado de San Juan Tezompa, ubicado en el municipio de Chalco, Estado de México, a la alcaldía Milpa Alta.

Los presuntos narcomenudistas señalaron en sus confesiones a tres policías capitalinos:

• Carlos Cervantes Hernández, quien estuvo adscrito a la alcaldía Milpa Alta y después fue reasignado a la alcaldía Cuajimalpa; este uniformado habría recibido de Los Barrabas 10 mil pesos semanales a cambio de protección y traslado de droga durante cinco años.
• Sin embargo, Cervantes Hernández fue trasladado a Cuajimalpa, por lo que su sucesor, Juan Arturo Hernández Pérez, presuntamente habría seguido con sus prácticas; es decir, recibía 10 mil pesos semanales para transportar drogas a bordo de la patrulla FGJ 96A1 para llevar a cabo los traslados.
• El tercer policía presuntamente señalado por Los Barrabas sería un familiar directo del policía Juan Arturo Hernández, quien estaría adscrito a la alcaldía Venustiano Carranza y también habría apoyado en el transporte de las drogas en vehículos oficiales.

Al respecto, la Fiscalía de la Ciudad de México no ha emitido ninguna postura al respecto y no se sabe cuál es el estatus de los policías señalados por los presuntos narcomenudistas.

No obstante, fuentes consultadas por Carlos Jiménez, quienes solicitaron el anonimato, señalaron que el Área de Asuntos Internos de la dependencia ya tiene conocimiento de los hechos, por lo que ya realizan las indagatorias correspondientes.

Además, se tiene conocimiento de que el policía Juan Arturo Hernández Pérez se encuentra en “la congeladora”, como se le llama al servicio al que asignan a los uniformados no deseados, pues se encuentra únicamente al cuidado de la bodega de indicios en la alcaldía Azcapotzalco.

Mientras, el policía Juan Arturo Hernández Pérez se encuentra asignado a una Coordinación Territorial; sin embargo de su familiar no se tienen mayores datos.

KT