Dan 97 años de prisión a hombre por abuso a menor durante años en Nuevo León

La Fiscalía General de Justicia del Estado informó que Martín Alonso “N” fue condenado por los delitos de violación equiparada, abuso sexual y atentados al pudor.

Martín Alonso “N” fue condenado casi a 100 años de prisión. | Cortesía
Monterrey, Nuevo León /

Un hombre fue sentenciado a 97 años y tres días de prisión por abusar de una niña de manera repetida y sostenida durante seis años en el estado de Nuevo León.

La Fiscalía General de Justicia del Estado informó que Martín Alonso “N” fue condenado por los delitos de violación equiparada, abuso sexual y atentados al pudor.



El pasado 18 de diciembre, se realizó una audiencia en la que se determinó la culpabilidad del imputado, y se le dictó sentencia.

El juez desestimó los argumentos de la defensa del hombre, y concedió la razón al agente del ministerio público investigador, quien presentó “un caudal probatorio incontrovertible”, lo cual no dejó espacio a una duda razonable sobre la responsabilidad del entonces acusado.

Para esto, las autoridades presentaron pruebas materiales, documentales, periciales y dictámenes del orden científico y testimonios.

Además de la pena privativa de la libertad, el hombre deberá pagar una indemnización por concepto de reparación del daño, cuyo monto no fue detallado por la Fiscalía del Estado.

Sobre los hechos delictivos puntualmente, se señaló que el hombre ejerció actos sexuales a la víctima en contra de su voluntad, causando daño físico y psicológico, lo cual afectó su formación y desarrollo integral en la infancia.

El abuso ocurrió entre los años 2016 y 2022, en un municipio del Área Metropolitana de Monterrey, el cual no fue especificado.

La niña, cuya identidad está reservada, comenzó a sufrir los abusos cuando tenía entonces siete años de edad.

Martín Alonso “N” se mantendrá recluido en un penal de carácter estatal en Nuevo León.


¿Cuáles son las consecuencias del abuso a un menor?


El abuso a un menor puede tener consecuencias devastadoras y a largo plazo para el niño o adolescente afectado. Estas consecuencias pueden manifestarse en diversos aspectos de la vida del menor, incluyendo:


Consecuencias físicas:

  • Lesiones físicas, algunas de las cuales pueden ser graves o permanentes.
  • Problemas de salud a largo plazo, incluyendo trastornos sexuales, infecciones o enfermedades de transmisión sexual, y problemas relacionados con el desarrollo físico y emocional.

Consecuencias emocionales y psicológicas:

  • Trauma emocional severo que puede resultar en trastorno de estrés postraumático (TEPT), ansiedad, depresión, trastornos del apego, y otros problemas emocionales.
  • Sentimientos de vergüenza, culpa, autoestima baja, y desvalorización personal.
  • Problemas de confianza y dificultades para establecer relaciones saludables en el futuro.
  • Comportamientos autodestructivos, incluyendo autolesiones, intentos de suicidio, o trastornos alimenticios.

Consecuencias sociales y comportamentales:

  • Dificultades en la escuela, incluyendo problemas académicos, absentismo escolar, y dificultades para relacionarse con compañeros y maestros.
  • Comportamientos agresivos o autolesivos.
  • Problemas de conducta, como comportamiento delictivo o uso de sustancias.
  • Aislamiento social y dificultades para formar y mantener relaciones interpersonales saludables.

Consecuencias a largo plazo:

  • Efectos duraderos en el desarrollo cognitivo, emocional, y social del menor.
  • Mayor riesgo de experimentar abuso o violencia en el futuro.
  • Impacto en la salud mental a lo largo de toda la vida, con posibles problemas de salud mental crónicos.

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