Tras presuntamente dormitar al volante, el chofer de la ruta 228 protagonizó un aparatoso accidente, en el que al menos cuatro pasajeros resultaron lesionados.
El percance en el que además la unidad derribó dos postes de concreto, ocurrió la tarde de este martes, sobre la avenida Benito Juárez y Perronilo Treviño, en la colonia la Esmeralda, en Guadalupe.
- Policía
Según las primeras versiones, el chofer habría dormitado, por lo que se estrelló de frente contra un poste de concreto; la velocidad de la unidad fue tal, que el camión avanzó y derribó un segundo poste, hasta detenerse milagrosamente metros antes de una parada de camión, donde había decenas de personas esperando el transporte.
En la unidad viajaban una veintena de pasajeros, de los cuales al menos cuatro resultaron lesionados, entre ellas una mujer que quedó tendida sobre la banqueta.
Elementos de Protección Civil y paramédicos acudieron al lugar para dar atender la emergencia, mientras tránsito municipal desvío el tráfico en la zona.
El chofer, un hombre de aproximadamente 60 años de edad, quedó a disposición de las autoridades mientras se realizan las investigaciones.
¿Qué hacer durante un accidente vial?
Mantén la calma y evalúa la situación: Respira profundamente y evalúa rápidamente la situación para determinar la gravedad del accidente.
Verifica tu seguridad y la de los demás: Asegúrate de que tú y los pasajeros estén bien. Si hay heridos, no los muevas a menos que sea absolutamente necesario para evitar más lesiones.
Sal del tráfico: Si es posible y seguro, mueve los vehículos fuera del flujo del tráfico para evitar más accidentes. Si no es posible mover los vehículos, enciende las luces de emergencia para alertar a otros conductores.
Llama a los servicios de emergencia: Contacta a la policía y, si hay heridos, a una ambulancia. Proporciona la mayor cantidad de información posible sobre la ubicación y la gravedad del accidente.
Usa señales de advertencia: Coloca triángulos de emergencia o bengalas para alertar a otros conductores del accidente y reducir el riesgo de más colisiones.
Intercambia información: Si las circunstancias lo permiten, intercambia información con los otros conductores involucrados, incluyendo nombres, números de teléfono, direcciones, números de licencia de conducir, números de placas y detalles del seguro.
Documenta el accidente: Toma fotos del lugar del accidente, los vehículos involucrados y cualquier daño visible. Esto puede ser útil para informes policiales y reclamaciones de seguros.
No admitas culpa: No discutas quién tuvo la culpa del accidente. Deja que las autoridades y las aseguradoras determinen eso.
Busca atención médica: Aunque no sientas dolor inmediato, es importante que un profesional médico te revise para detectar posibles lesiones que podrían manifestarse más tarde.
Reporte el accidente a tu aseguradora: Contacta a tu compañía de seguros lo antes posible para informarles del accidente y comenzar el proceso de reclamación.