Los familiares y amigos de María Guadalupe Peralta comenzaron con una búsqueda para encontrarla, pues desde el 2015, según su esposo, ella decidió abandonarlo a él y a su familia; hoy, casi siete años después, sus restos fueron encontrados en una tumba clandestina hecha en el patio de su propia casa.
Los restos de María Guadalupe, a quien sus familiares le decían Mary de cariño, se encontraban enterrados en una tumba clandestina, la cual fue descubierta cuando su familia decidió hacer una remodelación de su hogar, ubicado en la colonia Pitágoras, alcaldía Álvaro Obregón.
La Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México informó que se encuentra en la búsqueda de Celedonio Carlos, quien fue identificado como el esposo de María Guadalupe Peralta cuando ella desapareció.
Celedonio Carlos, según los familiares de la víctima, tras la desaparición de María Guadalupe Peralta, dijo que ella lo había abandonado, por lo que decidió irse y dejar desamparadas a sus dos hijas, quienes actualmente cuentan con ocho y 20 años de edad.
Sin embargo, el argumento utilizado por Celedonio Carlos no convenció a la familia de María Guadalupe Peralta, pues ella nunca habría dejado a sus hijas de esa forma.
“Mary jamás dejaba sus hijas, no puede ser que se haya ido sin sus hijas. Eso yo no lo creía”, dijo Paulina Raquel Gómez, hermana de la víctima.
Tras el hallazgo, la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México se presentó en la zona y comenzó a excavar en el patio para rescatar los restos óseos de la mujer que se presumía como desaparecida.
Los responsables de la búsqueda, uno a uno fueron limpiando y poniendo sobre una sábana blanca todos los huesos humanos encontrados: cráneo, pelvis, tibia, peroné, partes de los dedos y manos, e inclusive se rescataron algunos cabellos.
Junto a los restos humanos, el personal de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México encontró ropa de vestir, donde se destacó el hallazgo de un brasier, un zapato tenis y calcetas.
Toda la evidencia encontrada fue trasladada a los laboratorios de criminalística capitalino, donde serán sometidos a pruebas de ADN para asegurar que se trata de María Guadalupe Peralta; por otro lado, las autoridades señalaron que será complicado determinar cuál fue su causa de muerte.
Pese a no tener noticias sobre Mary en casi siete años, sus familiares mantenían la esperanza de encontrarla con vida.
“No, no esperaba encontrarla en las condiciones en las que la encontré; teníamos una esperanza de que estuviera viva, de que la encontráramos con vida”, dijo Beatriz, hermana de María Guadalupe.
La familia de María Guadalupe Peralta destacó que, desde que la víctima desapareció, no dejaron de buscarla y de sentir incertidumbre por cuál sería su paradero.
“Fueron seis años y medio… la verdad que todos los días fueron de angustia de estar pensando en ella: ¿dónde está?, ¿si está bien?, y pues ya supimos que la verdad no. No merecía eso mi hermana, no se merecía esa muerte, la verdad”, dijo Paulina Raquel Gómez.
Ahora, la familia de la víctima se pregunta cómo le harán saber a sus hijas la muerte de su madre; además, expresaron que sólo buscan darle un sepulcro digno y esperan que el responsable pague por el crimen.
“Eso va a ser muy de doloroso es un proceso muy triste la verdad y las niñas… pues no sé cómo vamos a hacer eso, para darles esa noticia”, dijo su hermana Paulina Raquel Gómez.
KT