Durante el último fin de semana, las autoridades locales de San Dimas, Durango, se han movilizado para hacer frente a un incendio forestal que ha generado preocupación en la región.
Afortunadamente, hasta el momento no se han reportado afectaciones significativas entre la población cercana, gracias a la rápida acción de los equipos de respuesta y la coordinación efectiva entre diferentes instancias gubernamentales.
Jorge Paniagua, Director de Gestión Integral de Riesgos de la Coordinación Estatal de Protección Civil, ha destacado la importancia de abordar estos incendios de manera inmediata y eficiente.
En este sentido, la Secretaría de Recursos y Medio Ambiente del estado de Durango ha desplegado todos los recursos necesarios para contener y extinguir el fuego, priorizando los esfuerzos en los ejidos del Espadañal y Carboneras en el municipio de San Dimas.
La magnitud del desafío no puede ser subestimada. Desde el pasado 8 de mayo, el incendio en el ejido Espadañal ha continuado activo, alimentado por las condiciones complejas del terreno y las dimensiones considerables del fuego.
Este panorama ha requerido la colaboración de más de 300 personas, incluyendo personal estatal y federal de protección civil, así como efectivos militares de la SEDENA y especialistas de CONAFOR. Se espera que este número aumente a medida que se sumen más recursos a los esfuerzos de contención.
El viernes pasado, otro foco de incendio surgió en el ejido Carboneras, agregando complejidad a la situación en San Dimas. Jorge Paniagua, tras realizar un sobrevuelo por la zona, ha detallado las acciones que se están llevando a cabo para controlar esta nueva emergencia.
La coordinación y el trabajo en equipo son fundamentales para garantizar una respuesta efectiva y mitigar los riesgos tanto para la población como para el medio ambiente.
Arturo Galindo, Coordinador Estatal de Protección Civil en Durango, ha subrayado la gravedad del problema a nivel estatal. En lo que va del año 2024, se han registrado 190 incendios forestales, afectando una superficie de más de 17 mil hectáreas.
Los incendios activos no se limitan solo a San Dimas, sino que también afectan a otras regiones como Pueblo Nuevo, Mezquital y Guanaceví.
Ante esta situación, es imperativo intensificar los esfuerzos de prevención, detección y combate de incendios forestales en todo el estado.
La concientización pública sobre las medidas de seguridad y la protección del medio ambiente también juega un papel crucial en la reducción de estos incidentes.
En resumen, el incendio en San Dimas es un recordatorio contundente de los desafíos que enfrentamos en la preservación de nuestros recursos naturales y la protección de nuestras comunidades.
Requiere una respuesta integral y coordinada a nivel estatal y local, así como el compromiso continuo de todos los sectores de la sociedad para enfrentar esta emergencia con determinación y solidaridad.
IML