Un taxista en estado inconveniente provocó un percance automovilístico que dejó severos daños materiales en la colonia Las Luisas de Torreón. El percance ocurrió cerca de la medianoche del viernes 31 de mayo.
Según los primeros peritajes, el chofer de la unidad de transporte en color amarillo de la base Zodiaco se trasladaba por la calle Yucatán del mencionado sector habitacional. Al llegar a la avenida José Carrillo, no hizo su alto correspondiente y chocó con su parte frontal el costado izquierdo de un sedán en color plata que circulaba con preferencia.
Lo anterior dejó daños de consideración en ambas unidades. Afortunadamente, no se presentaron personas lesionadas, por lo que no fue necesaria la presencia de paramédicos de Cruz Roja Mexicana.
Peritos del Tribunal de Justicia Municipal acudieron para realizar el croquis correspondiente. Además, se presentó al conductor responsable al Ministerio Público por conducir en estado de ebriedad. Será el juez calificador quien determine la responsabilidad del accidente, así como la situación legal del chofer.
¿Cuáles son las consecuencias de manejar en estado de ebriedad?
Manejar en estado de ebriedad puede tener una serie de consecuencias graves, tanto para el conductor como para otras personas en la carretera, por ejemplo, aumenta significativamente el riesgo de sufrir un accidente de tráfico. La falta de coordinación, disminución del tiempo de reacción y la dificultad para concentrarse hacen que el conductor ebrio sea mucho más propenso a cometer errores en la carretera.
Además, los accidentes automovilísticos causados por conductores ebrios pueden resultar en lesiones graves e incluso la muerte, tanto para el conductor ebrio como para otras personas involucradas en el accidente.
Por otra parte, conducir bajo los efectos del alcohol es ilegal en la mayoría de los países y conlleva severas consecuencias legales. Esto puede incluir multas, pérdida de la licencia de conducir, e incluso penas de cárcel, especialmente si el conductor causa lesiones o muertes.
Los accidentes causados por conductores ebrios pueden tener un impacto emocional y psicológico duradero en las víctimas y sus familias. Las secuelas emocionales pueden incluir traumas, estrés postraumático y dificultades para volver a confiar en la conducción de vehículos.
Finalmente, los accidentes causados por conductores ebrios pueden resultar en daños materiales significativos tanto para los vehículos involucrados como para la propiedad pública y privada cercana al lugar del accidente.
Es importante recalcar que las consecuencias de manejar en estado de ebriedad pueden ser devastadoras, tanto a nivel personal como legal y social por lo que es crucial concienciar sobre los peligros de conducir bajo los efectos del alcohol y promover conductas responsables al volante.