Familiares de Luis Eduardo, el bebé de tan solo un año de edad que accidentalmente fue envenenado por su abuela, otorgaron el perdón hacia la mujer ante las autoridades ministeriales de la Fiscalía General de Coahuila.
Tras las indagatorias que se realizaron exhaustivamente, por parte del personal de Servicios Periciales y de elementos de la Agencia de Investigación Criminal (AIC), se comprobó que la muerte del menor fue de manera accidental.
Se concluyó que esta acción que realizó la imputada no fue dolosa, ni ventajosa, sino meramente circunstancial, por lo que fue señalada por el delito de homicidio culposo, que alcanza algunos beneficios.
La determinación de su libertad, no estará a cargo de un juez, sino de las mismas autoridades ministeriales, fundamentado en la conclusión del dictamen médico legista, así como las investigaciones de campo periciales.
De igual manera, se informó que la abuela del bebé no estuvo detenida, sino que se le retuvo para el proceso de investigación pertinente por la muerte del menor.
En relación a los hechos que ocurrieron el pasado domingo, se mencionó que el bebé se sentía mal, por lo que la abuela decidió darle lo que creó que era un medicamento, sin saber que le estaba dando veneno a su nieto de tan solo un año.
Y es que, según se mencionó, el veneno estaba adentro de un envase de jarabe para la tos, motivo por el cual ocurrió la trágica confusión.
Poco después, al observar que el menor se convulsionaba pidió ayuda a sus familiares y lo llevaron a la Clínica 16 del Seguro Social, donde varias horas después perdió la vida.
La mujer que lo tenía bajo su cuidado, indicó que estaba tosiendo mucho, por lo que creyó que el medicamento era jarabe para remediar esos síntomas, pero resultó que era garrapaticida asuntol.