Tras haber formalizado su registro como candidato a la alcaldía de Monterrey por la coalición "Fuerza y Corazón por Nuevo León", Adrián de la Garza Santos, afirmó que él y su familia no tienen "esqueletos en el clóset" y, por lo tanto, no han necesitado recurrir a amparos legales, como han hecho otros funcionarios.
En entrevista para Telediario Radio con Luis García, el candidato a la alcaldía de Monterrey por la coalición "Fuerza y Corazón por Nuevo León", explicó que su decisión de volver a postularse como alcalde se basó en el respaldo recibido por parte de la ciudadanía.
“Ninguno, estamos con la frente en alto, muy orgulloso también de cómo la gente fue quien me animó a esta decisión… Estoy muy decidido, no tengo nada que esconder, al contrario, mire, yo no me he amparado, ni mi familia, y los de enfrente sí, porque saben que ellos sí tienen esqueletos... ".
De la Garza Santos anunció que su campaña se centrará en propuestas concretas y estará enfocada en resolver problemas que preocupan a la ciudadanía.
"Mi campaña se centrará en propuestas concretas y estará enfocada en resolver problemas. Eso es lo principal que debemos tener en nuestra visión y en nuestro rumbo de propuestas: resolver los problemas que actualmente enfrenta la ciudad de Monterrey y su Área Metropolitana".
Al ser cuestionado sobre su opinión respecto a sus oponentes en la contienda, evitó responder directamente, enfatizando en que su enfoque de campaña estará en presentar las mejores propuestas para la ciudadanía.
"No tengo ningún comentario, mi enfoque es, repito, presentar las mejores propuestas para solucionar los problemas de Monterrey. La gente me conoce, sabe que soy un hombre que cumple, que resuelve, que tengo la experiencia y la capacidad para hacerlo".
En cuanto al tema de la fiscalía, el candidato a la alcaldía de Monterrey señaló que fue el gobernador de Nuevo León quien le solicitó que buscará el cargo de fiscal del estado. Sin embargo, al informarle que sería implacable en la lucha contra todo tipo de delincuencia, comenzaron a surgir problemas.
"Él me pidió que fuera fiscal. Tuvimos una reunión en su casa y después varias más. En esas reuniones, yo le dejé muy claro que, en caso de ser fiscal, sería implacable en contra de todo tipo de delincuencia. Creo que es mejor solicitar un poco de ruido, quizás, no lo sé, porque luego cambió radicalmente su postura".
En cuanto a la clave que tendrán estas elecciones del 2 de junio, dijo que será la experiencia y la fuerza para resolver los problemas que actualmente enfrenta el municipio de Monterrey.
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