Era la mañana del 12 de febrero de 2015 y como pocas veces se veía por aquellos lares, un bloque de varias camionetas se asomó por San José Xacxamayo para anunciar la llegada del entonces gobernador de Puebla Rafael Moreno Valle Rosas, y el alcalde Toni Gali, para la presentación de obras de agua potable y drenaje en la comunidad.
Esta localidad, ubicada al sur de la capital poblana, veía en la visita del exgobernador el fin al mayor de sus problemas: el acceso al agua potable y drenaje en sus casas.
Moreno Valle, acostumbrado a la parafernalia, se hizo acompañar del director de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), David Korenfeld Federman, y del presidente municipal de Puebla, Antonio Gali Fayad.
Los habitantes vieron gustosos cómo el gobernador y las autoridades inauguraban el primer y único sistema de agua potable para toda la localidad, con el que se prometía abastecimiento de 106 mil litros diariamente para las 269 viviendas que había en el pueblo.
"No hay mayor satisfacción que ver la sonrisa de una mujer, de un hombre, de un joven o de un niño que tiene acceso al agua potable", comentó entonces Moreno Valle.
Más de dos millones de pesos para agua en Xacxamayo, pero el líquido no llegó
Las obras tuvieron un costo de 2 millones 515 mil pesos y fueron parte de las acciones de la Conagua en la 'Cruzada Nacional contra el Hambre', impulsada por el presidente Enrique Peña Nieto; no obstante, se proyectaron más recursos para San José Xacxamayo.
"Transferiremos 9 millones de pesos al gobierno del estado y al municipal para hacer el círculo completo en esta comunidad, con drenaje y tratamiento. Xacxamayo será ejemplo de muchas regiones del país", dijo optimista Korenfeld, quien dos meses después renunció al cargo aunque había prometido acabar con el desabasto en menos de dos años.
- Economía
Las autoridades se marcharon de San José Xacxamayo y la tambora sonó porque los habitantes al fin tendrían agua. Fue un día que, como en toda fiesta, se volvió efímero y con 'cruda' conforme avanzaban los días el líquido no llegaba.
Tal como TELEDAIRIO evidenció, la carencia de agua potable en San José Xacxamayo todavía persiste a la fecha y aquellos reportajes de 2011 que mostraban a los niños bajando la barranca con sus burros por un poco de agua siguen siendo realidad, ya con otros pequeños encargados de esas tareas.
Tampoco se consolidó el proyecto de instalación de drenaje y una planta de tratamiento en esta comunidad parecería un 'sueño guajiro', que aún depende de un jagüey con aguas verdosas para regar los pocos plantíos que florecen en la zona.
La infraestructura que el gobierno morenovallista no concretó para San José Xacxamayo se sumó a otro proyecto que ideó el gobierno peñista para brindar agua a los habitantes de la localidad, aunque también fracasó.
Fue el programa de 'Cisternas para Captura y Almacenamiento de Agua Pluvial', con el que se construyeron 75 cisternas con capacidad de 10 mil litros cada una para capturar y almacenar agua pluvial, además, se instalaron 15 sistemas de filtración de agua de lluvia, con un costo de un millón 335 mil 864 pesos.
AGA