Este 24 de marzo se celebra el Día Internacional de la Tuberculosis, una enfermedad respiratoria ocasionada por una bacteria llamada Mycobacterium Tuberculosis, misma que puede prevenirse con una vacuna, o ser curable si se trata a tiempo.
La vacuna utilizada para la prevención de esta enfermedad, de acuerdo al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), es conocida como BCG, y debe aplicarse a los recién nacidos para garantizar un tratamiento temprano y evitar cualquier tipo de contagio.
Aunque una única dosis es suficiente, hay quienes realizan la aplicación de esta vacuna a los 6, 13 y 39 años, sin embargo, esto solamente se realiza por orden de un médico profesional y si éste así lo consideró adecuado, según la condición médica de cada persona.
Esta vacuna no suele tener efectos secundarios en los recién nacidos, sin embargo, con el tiempo pueden llegar a presentar una pequeña cicatriz en el brazo donde fue aplicada.
De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Tuberculosis es la decimotercera causa de muerte y la enfermedad infecciosa más mortífera por detrás del Covid-19, por lo que es importante su detección temprana, así como el cuidado necesario al momento de padecerla.
Dicha organización dio a conocer que en el año 2020 enfermaron de tuberculosis 9,9 millones de personas en todo el mundo, de las cuales 5,5 millones eran hombres, 3,3 millones eran mujeres y 1,1 millones eran niños.
Síntomas
- Tos productiva
- Dolores torácicos
- Debilidad
- Pérdida de peso
- Fiebre
- Sudores nocturnos
Tratamiento
La Tuberculosis se trata con una combinación estándar de cuatro medicamentos que se administra durante seis meses al paciente y debe ir acompañada de información y la receta recomendada por un médico profesional.
Esta enfermedad puede ser contagiada por tener contacto con las gotas de saliva de una persona con Tuberculosis, por lo que es importante que en caso de presentar algún síntoma, el paciente debe acudir al médico lo antes posible.
KM