ESPECIAL.- La educación sexual desde que los niños son pequeños podría incluso, llegar a salvar vidas. Además de ayudarlos a conocer sus cuerpos, puede contribuir a ponerlos en alerta ante situaciones de peligro, que aunque no debiera ser así, pudieran experimentar aun siendo pequeños. Una pequeña niña de 6 años demostró la importancia de estas lecciones al hablar en una de sus tareas sobre las relaciones y muestras de afecto consensuadas.
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Y es que su profesora de la clase de Educación Sexual Integral del colegio en donde estudia, en una provincia de Córdoba, Argentina, le dejó como tarea dar un final alternativo al cuento de La Bella Durmiente. Luego de escuchar lo que quería decir, su madre, ayudó a la pequeña a completar sus deberes, y luego, presumió su aprendizaje en Twitter.
Resulta que la pequeña, de nombre Agostina, le explicó a su madre, Flor, que lo que realmente le molestaba del final del famoso cuento de Charles Perrault es la cuestión de que el príncipe bese a la princesa cuando está dormida, pues no sabía por qué alguien podía hacer esto sin tener el permiso de la otra persona.
Su madre, únicamente le ayudó a ponerle nombre a lo que ella estaba expresando: consentimiento. Al parecer, Agostina entendía ya muy bien que nadie tiene derecho a besar o tocar las partes íntimas de otra persona sin su permiso. Por esto, con ayuda de su madre cambió el final por algo así:
"La princesa despierta al ser besada por el príncipe, y se enoja y lo echa, pues no hay que besar a nadie sin su consentimiento", sentencia Agostina.
Su madre compartió la historia en Twitter junto con la fotografía de la tarea, que por supuesto se volvió viral y fue aplaudida por muchas mujeres, feministas y otras personas que entienden la importancia de que los pequeños entiendan sobre el consentimiento y las cuestiones de la educación sexual.
Por supuesto, Flor también recibió críticas infundadas de quienes la acusaban de haber realizado ella la tarea de la pequeña, pues hay quienes no consideran a los niños lo suficientemente inteligentes para comprender estas cosas. Sin embargo, por supuesto que los niños son inteligentes y tienen el derecho y la capacidad de comprender estos temas, por lo que Flor simplemente respondió con un video de la pequeña haciendo sus propios deberes.
Los profesionales comentan que es muy importante que se hable con los pequeños de este tema sin poner en duda su capacidad de comprensión, pues conocer hará que estén más seguros de las violencias de índole sexual. Por su puesto hay que encontrar la manera más pedagógica para que entiendan y esta, de utilizar una historia para poner ejemplos claros, es una buena idea.
La Bella Durmiente ha sido objetivo de muchas críticas en los últimos años, pues en el cuento original, incluso se sugiere que el príncipe mantuvo relaciones sexuales con Aurora mientras ella dormía, lo cual, también está catalogado como violación. Incluso, un beso sin consentimiento es algo serio, en especial si se le está contando a niños pequeños, que deben aprender a poner límites.
Un colectivo feminista británico, liderado por Sarah Hall expresó el año pasado su preocupación sobre que el cuento pudiera normalizar y hasta romantizar la violencia sexual e inició una campaña de concientización al respecto. Según estas opiniones, el cuento no solo pone en riesgo a las y los pequeños, sino que podría sentar un ejemplo sobre relaciones no consensuadas que podrían imitar en el futuro.
RC
ESPECIAL.- La educación sexual desde que los niños son pequeños podría incluso, llegar a salvar vidas. Además de ayudarlos a conocer sus cuerpos, puede contribuir a ponerlos en alerta ante situaciones de peligro, que aunque no debiera ser así, pudieran experimentar aun siendo pequeños. Una pequeña niña de 6 años demostró la importancia de estas lecciones al hablar en una de sus tareas sobre las relaciones y muestras de afecto consensuadas.
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Y es que su profesora de la clase de Educación Sexual Integral del colegio en donde estudia, en una provincia de Córdoba, Argentina, le dejó como tarea dar un final alternativo al cuento de La Bella Durmiente. Luego de escuchar lo que quería decir, su madre, ayudó a la pequeña a completar sus deberes, y luego, presumió su aprendizaje en Twitter.
Resulta que la pequeña, de nombre Agostina, le explicó a su madre, Flor, que lo que realmente le molestaba del final del famoso cuento de Charles Perrault es la cuestión de que el príncipe bese a la princesa cuando está dormida, pues no sabía por qué alguien podía hacer esto sin tener el permiso de la otra persona.
Su madre, únicamente le ayudó a ponerle nombre a lo que ella estaba expresando: consentimiento. Al parecer, Agostina entendía ya muy bien que nadie tiene derecho a besar o tocar las partes íntimas de otra persona sin su permiso. Por esto, con ayuda de su madre cambió el final por algo así:
"La princesa despierta al ser besada por el príncipe, y se enoja y lo echa, pues no hay que besar a nadie sin su consentimiento", sentencia Agostina.
Su madre compartió la historia en Twitter junto con la fotografía de la tarea, que por supuesto se volvió viral y fue aplaudida por muchas mujeres, feministas y otras personas que entienden la importancia de que los pequeños entiendan sobre el consentimiento y las cuestiones de la educación sexual.
Por supuesto, Flor también recibió críticas infundadas de quienes la acusaban de haber realizado ella la tarea de la pequeña, pues hay quienes no consideran a los niños lo suficientemente inteligentes para comprender estas cosas. Sin embargo, por supuesto que los niños son inteligentes y tienen el derecho y la capacidad de comprender estos temas, por lo que Flor simplemente respondió con un video de la pequeña haciendo sus propios deberes.
Los profesionales comentan que es muy importante que se hable con los pequeños de este tema sin poner en duda su capacidad de comprensión, pues conocer hará que estén más seguros de las violencias de índole sexual. Por su puesto hay que encontrar la manera más pedagógica para que entiendan y esta, de utilizar una historia para poner ejemplos claros, es una buena idea.
La Bella Durmiente ha sido objetivo de muchas críticas en los últimos años, pues en el cuento original, incluso se sugiere que el príncipe mantuvo relaciones sexuales con Aurora mientras ella dormía, lo cual, también está catalogado como violación. Incluso, un beso sin consentimiento es algo serio, en especial si se le está contando a niños pequeños, que deben aprender a poner límites.
Un colectivo feminista británico, liderado por Sarah Hall expresó el año pasado su preocupación sobre que el cuento pudiera normalizar y hasta romantizar la violencia sexual e inició una campaña de concientización al respecto. Según estas opiniones, el cuento no solo pone en riesgo a las y los pequeños, sino que podría sentar un ejemplo sobre relaciones no consensuadas que podrían imitar en el futuro.
RC
Su madre compartió la historia en Twitter junto con la fotografía de la tarea, que por supuesto se volvió viral y fue aplaudida por muchas mujeres, feministas y otras personas que entienden la importancia de que los pequeños entiendan sobre el consentimiento y las cuestiones de la educación sexual.
Por supuesto, Flor también recibió críticas infundadas de quienes la acusaban de haber realizado ella la tarea de la pequeña, pues hay quienes no consideran a los niños lo suficientemente inteligentes para comprender estas cosas. Sin embargo, por supuesto que los niños son inteligentes y tienen el derecho y la capacidad de comprender estos temas, por lo que Flor simplemente respondió con un video de la pequeña haciendo sus propios deberes.
Los profesionales comentan que es muy importante que se hable con los pequeños de este tema sin poner en duda su capacidad de comprensión, pues conocer hará que estén más seguros de las violencias de índole sexual. Por su puesto hay que encontrar la manera más pedagógica para que entiendan y esta, de utilizar una historia para poner ejemplos claros, es una buena idea.
La Bella Durmiente ha sido objetivo de muchas críticas en los últimos años, pues en el cuento original, incluso se sugiere que el príncipe mantuvo relaciones sexuales con Aurora mientras ella dormía, lo cual, también está catalogado como violación. Incluso, un beso sin consentimiento es algo serio, en especial si se le está contando a niños pequeños, que deben aprender a poner límites.
Un colectivo feminista británico, liderado por Sarah Hall expresó el año pasado su preocupación sobre que el cuento pudiera normalizar y hasta romantizar la violencia sexual e inició una campaña de concientización al respecto. Según estas opiniones, el cuento no solo pone en riesgo a las y los pequeños, sino que podría sentar un ejemplo sobre relaciones no consensuadas que podrían imitar en el futuro.
RC