Un conductor que fue arrestado por circular a exceso de velocidad, cambió su lugar detrás de volante con su perro, que estaba en el asiento de pasajeros, para intentar que la policía no lo detuviera, de acuerdo a las autoridades de Colorado, Estados Unidos.
El hombre detenido fue visto por un policía cuando se movía dentro del carro antes de salir por el lado del pasajero durante la noche del 13 de mayo, en Springfield, una localidad de unos mil 300 habitantes en el este del estado, indicaron las autoridades en Facebook.
De acuerdo al conductor arrestado, no iba manejando el vehículo sino su perro, pero mostraba signos de que se encontraba en estado de ebriedad. Cuando el agente de la policía le preguntó cuánto había tomado, trató de huir corriendo, sin embargo, fue detenido a pocos metros de distancia.
Posteriormente, el hombre fue llevado al hospital para una revisión, y después fue arrestado bajo sospecha de cargos como conducir bajo los efectos del alcohol o narcóticos y de manejar en estado de incapacidad, además de por órdenes de arresto anteriores.
Mientras tanto, el perro del hombre detenido fue temporalmente entregado a un supuesto conocido para que lo cuidara mientras su dueño permanecería en la cárcel el tiempo que corresponda.
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“El perro fue entregado a un conocido del conductor para que lo cuidara mientras el tercero estaba en la cárcel (…) El perro no enfrenta ningún cargo y lo dejaron ir sólo con una advertencia”, escribió la policía en la publicación de Facebook.
Cabe señalar que el hombre fue detenido DUI, cuyas siglas en inglés son Driving Under Influence o Driving While Intoxicated, y es la acción de conducir un vehículo bajo la influencia del alcohol, drogas, cualquier medicamento o sustancia controlada. Este delito en Estados Unidos se castiga según las leyes de cada estado, que puede ser con siete años de cárcel hasta pagaro 50 mil dólares en multas.
AA