Dee Hodgson, de 53 años, ha impactado a todos con su historia. La abuelita señaló que, luego de pesar 180 kilos y tomar 20 medicamentos, cambió por completo su estilo de vida.
De acuerdo con la mujer, comenzó a trabajar con un entrenador, por lo que, con el paso del tiempo, disfrutó levantar pesas.
"Hice muchas clases al principio, pero cuando comencé a trabajar con un entrenador personal, desarrollé una pasión por el levantamiento de pesas y ese fue el disparador", comentó.
Dee puntualizó que sus amigos del gimnasio se convirtieron en un pilar fundamental en su proceso.
"Me ayudó más de lo que podría decir, y mis amigos en el gimnasio también han sido parte integral de mi transformación", dijo.
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Además, la mujer sorprendió a todos al revelar que estaba entrenando para una competencia deportiva.
"Estoy entrenando para una competencia de culturismo en noviembre en High Wycombe", argumentó.
Hodgson mencionó que, a partir de su cambio, pudo darse cuenta que no era feliz del todo.
“Pensé que era feliz, pero ahora miro hacia atrás y me doy cuenta de que estaba deprimida y dolorida. Dependía mucho de la gente, algo difícil y vergonzoso porque soy muy independiente", explicó.
Dee reveló que comenzó a motivarse aun más cuando la gente notó los cambios que ha tenido.
"La gente notaba la diferencia y yo me sentía más móvil y saludable. Fue cuando me di cuenta de que realmente se podía lograr una vida diferente", comentó.
La tierna abuelita mencionó que uno de los momentos más emotivos fue cuando, al jugar con su nieta, ella le realizó un comentario.
"Recuerdo que aproximadamente un año después de esta transformación estaba jugando a la mancha con mi nieta mayor, y ella se dio la vuelta y dijo: 'Nana, no sabía que podías correr'", recordó.
Finalmente, Dee señaló que ahora puede verse al espejo con orgullo.
“Ahora me miro al espejo con orgullo. Estoy recuperando los años que me robaron y soy dueña de mi futuro”, puntualizó.
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