Los sangrados nasales son un problema común que afecta a muchas personas, especialmente durante los meses más calurosos del año y ahora con frecuencia durante la ola de calor en México.
Conocidos como epistaxis, estos episodios ocurren cuando se rompen los pequeños vasos sanguíneos dentro de la nariz, y aunque generalmente no son graves, pueden resultar alarmantes si no se manejan correctamente.
Durante la primavera y el verano, los sangrados nasales tienden a ser más frecuentes debido a varios factores relacionados con las condiciones ambientales y los hábitos estacionales.
¿Qué causa los sangrados nasales por el calor?
Las altas temperaturas y la exposición prolongada al sol pueden resecar las membranas nasales, volviendo los vasos sanguíneos más frágiles y propensos a la ruptura.
Además, los cambios bruscos de temperatura afectan la circulación sanguínea en la nariz, aumentando el riesgo de sangrado.
Cuando ocurre un sangrado nasal, es esencial mantener la calma y tomar medidas adecuadas para detenerlo. Aquí hay algunas recomendaciones útiles:
- Posición adecuada: Si experimentas un sangrado nasal, siéntate y inclina ligeramente tu cuerpo hacia adelante. Mantén la cabeza erguida para evitar que la sangre fluya hacia la garganta.
- Presión directa: Usando el pulgar y el índice, aprieta suavemente la parte blanda de la nariz (las alas nasales) durante al menos 10 a 15 minutos. Esto ayuda a detener el sangrado al aplicar presión directamente sobre la zona afectada.
- Evita ciertas acciones: No inclines la cabeza hacia atrás ni te acuestes, ya que esto puede hacer que la sangre se deslice hacia la garganta, causando molestias o incluso asfixia. Tampoco intentes taponar la nariz con algodón, ya que esto podría irritar más las membranas nasales.
- Mantén la calma y la paciencia: La mayoría de los sangrados nasales se detienen con estos simples pasos. Sin embargo, si el sangrado persiste después de 15 minutos de presión continua, es recomendable buscar atención médica.
Recomendaciones para evitar el sangrado nasal
Para prevenir futuros episodios de sangrado nasal, especialmente durante el verano, considera seguir estos consejos:
- Hidratación: Bebe suficiente agua para mantener las membranas nasales hidratadas.
- Aumenta la humedad: Usa un humidificador en casa para mantener el aire húmedo, especialmente durante los días secos y calurosos.
- Protección solar: Usa un sombrero o gorra para proteger tu cara del sol directo, lo que puede ayudar a prevenir la sequedad nasal.
- Evita la manipulación excesiva: Intenta no manipular tu nariz en exceso, ya que esto puede irritar las membranas delicadas.
Con estos cuidados simples, pueden reducir la probabilidad de experimentar sangrados nasales durante los meses más calurosos del año. Recuerda siempre mantener la calma y buscar ayuda médica si el sangrado no se detiene con las medidas básicas de primeros auxilios.
ERV