El Templo Expiatorio del Sagrado Corazón de Jesús es una de las estructuras más emblemáticas de León, y este 8 de julio se cumplen 100 años que se colocó la primera piedra para su construcción en 1921, fecha en la que se conmemora su historia y detalles misteriosos que solo pocos conocen, como que un año antes a 1921 ya se estaba visualizando su construcción y contexto por Bernardo Chávez.
Fue en 1920 cuando Bernardo presentó el proyecto de construcción del Expiatorio al Obispo Emeterio Valverde y Téllez, quien no dudó en aceptar su construcción, pero primero prepararon los planos.
Este proyecto causó furor y emoción entre la población de ese entonces, por ello durante varios fines de semana se trabajó en la recolección de material para su construcción, actividad que impulsó el espíritu de trabajo que caracteriza al día de hoy a los leoneses.
Cabe destacar que en esas épocas la gente no tenía idea de que se trataría de un templo con las dimensiones que cuenta actualmente, pero mantenían la fe e intención de construirlo.
Pero ¿Qué es un templo expiatorio? El diccionario define expiatorio como el lugar para expiar, es decir, para sacar las culpas, los pecados, 'limpiarse' el corazón, etc.
Algo a destacar es que el Templo Expiatorio se construyó solo a base de limosnas, y al día de hoy sigue siendo trabajado a pesar de que tiene 100 años.
El diseño del templo, de estilo neogótico, fue encargado al Arquitecto Luis G Olvera en compañía de su padre Ángel Aranda, y don Bernardo durante 31 años hasta su muerte el 14 de junio de 1951, a los 83 años de edad, vertió una gran labor Jesús para construir uno de los más importantes símbolos de la ciudad como la frase "El trabajo todo lo puede".