ESPECIAL.- El 2020 prometía ser uno de los años más redituables en cuanto a la presentación de conciertos en vivo.
México se ha convertido en una parada obligatoria de grandes artistas para hacer giras por diversos estados de la República y consetir al público.
Fueron pocos los conciertos que se lograron concretar, desde la gira de los Backstreet Boys, pasando por el Jaripeo sin Fronteras de Pepe Aguilar o la última gira de Hombes G.
Hasta que una alerta mundial hizo parar todo y uno de los primeros en cancelar sus conciertos fue Ricky Martin.
El festival Vive Latino fue el último masivo que se llevó a cabo. A pesar que muchos buscaron su cancelación, los organizadores continuaron con el evento, siendo el primero en utilizar las medidas de salud que ya conocemos.
De la eventual cancelación de conciertos nació la evolución al digital: los famosos utilizaron sus redes sociales para compartir la necesidad de complacer a sus fans. Hubo desde grades producciones como el Tomorrowlad, Maluma o J Balvin, hasta otras más sencillas que también fueron vistas por miles de personas.
- Tras los Famosos
Uno de los primeros streaming más vistos fue el realizado por Alejandro Fernández, quien rompió su confinamiento para cantarle a todas la madres en su día.
Después, este tipo de shows vía streaming experimentaron una segunda "mutación" y se convirtieron en eventos virtuales de paga. Al principio hubo tantos errores que los creadores tuvieron que resolver los problemas en la marca, como la caída de la señal del concierto de Alejandra Guzmán o el que sufrió el grupo Bronco.
Poco a poco los conciertos se volvieron más normales en formato digital, pero el público quería que su dinero fuera remunerado con grandes producciones. Hubo quejas, como en el concierto de ov7 con el que festejarían sus 30 años, que al final no fue del agrado del público.
La necesidad de una alternativa extra llevó a la creación de los autoconciertos: shows en los que el público asiste a ver a su artista favorito pero ingresa con su vehículo. Bandas como Modetatto e Intocable se entregaron por completo en este formato.
En la parte final del año y según el semaforo epidemiológico, regresaron un par de conciertos presenciales, uno de ellos fue el regreso de las GranDiosas: se realizó con un aforo del 30 por ciento, pero algunos aseguraron que el recinto se excedió.