El arzobispo emérito de la Arquidiócesis de San Luis Potosí y segundo obispo de Torreón, Luis Morales Reyes, falleció este viernes dos de febrero a la edad de 87 años.
El que fue también presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano entre 1997 y 2000 nació el 5 julio de 1936 y era originario de Churumuco, Michoacán.
Fue obispo auxiliar y titular de la Diócesis de Tacámbaro en 1976 y 1979. En abril de 1985 fue nombrado como obispo coadjutor del obispo titular de Torreón, Fernando Romo González y la elección fue designada por el entonces papa Juan Pablo II.
El 18 de abril de ese año, según registro de La Opinión, se le dio la bienvenida al religioso por parte de la comunidad lagunera. Hubo una camioneta de la Catedral del Carmen al Auditorio Municipal de Torreón para este propósito para después dar lugar a una misa solemne que encabezó el delegado apostólico Gerónimo Prigione y otros obispos visitantes.
Luis Morales Reyes venía de Tacámbaro, donde también fungía como Obispo. Había nacido en Michoacán en el año de 1936 y tomó posesión de su cargo diocesano en Torreón al día 20 de abril. Mucha gente de Tacámbaro vino a acompañarlo.
¿Qué es un obispo coadjutor?
Se diferencia del cargo de obispo auxiliar por que el Coadjutor tiene por decirlo así, derecho de suceder al obispo de una diócesis, cuando fuese necesario. Fernando Romo había nacido en el año de 1916, ya tenía para entonces 69 años y había estado muy enfermo, de ahí el apoyo, según detalló La Opinión.
En ese entonces, Luis Morales fue encargado de armar un Plan Diocesano para la grey de la Diócesis de Torreón.
“Distinguiéndose por su celo apostólico y su cercanía paternal con sacerdotes y fieles. Su partida a la Casa del Padre constituye una gran pérdida para nuestra iglesia local y nacional. Unidos fraternalmente, le rogamos tener la bondad de ofrecer un triduo de eucaristías por el eterno descanso de nuestro querido hermano obispo, y encomendar su alma a la infinita misericordia”, externó la Conferencia del Episcopado Mexicano mediante un comunicado.