Hace unos días se hizo viral el video de un joven, quien con mucho valor y entusiasmo cruzó el Cerro de la Silla desde una cuerda floja, un deporte extremo reconocido en todo el mundo, el cual lleva el nombre de Highline.
Francisco González es un joven de 32 años, originario de Saltillo, quien relató haber participado en esta actividad sumamente peligrosa, pero a su vez, emocionante para quienes tienen experiencia en la misma.
- Tendencias
Francisco señala tener experiencia en escalada desde hace 10 años, sin embargo, fue apenas en 2021 que decidió formar parte de Slackline Monterrey, un grupo de jóvenes expertos en el deporte, quienes desde hace tiempo tenían el objetivo de subir el Cerro de la Silla.
“Practico escalada desde hace 10 años, conocí a estos chicos de Slackline, yo me uní a este equipo desde hace dos años, en la pandemia, y para la fecha ya hemos hecho bastantes misiones, hemos montado líneas de 800 metros en Hidalgo, Querétaro, San Miguel de Allende, Monterrey, y hemos estado ahí aprendiendo, tomando cursos”, dijo.
“Durante estos años me ha tocado participar en misiones y ellos tienen alrededor de 10 años practicando el deporte, en 2012 y desde entonces tenían la idea de poner una línea en el Cerro de la Silla”, detalló Francisco.
El deportista saltillense relata que la misión en el Cerro de la Silla les tomó alrededor de 16 horas, pues el highline también implica el traslado del equipo necesario como arneses, cuerdas, anclaje, entre otros, lo que toma bastante tiempo y esfuerzo físico.
Asimismo, también reveló que fue en su trabajo como fotógrafo que comenzó a involucrarse más en el deporte, cuando realizó un documental acerca del highline, lo que lo inspiró a formar parte del mismo y hoy en día ha logrado cruzar hasta 300 metros de línea.
“Me dedico a la fotografía y al video, soy comunicólogo, hace 10 años me tocó hacer un documental sobre eso, me clavé con la escalada y a partir de ahí me involucré más con la comunidad, que es muy unida”, dijo.
Aunque el highline y el slackline pueden llegar a ser deportes muy llamativos, Francisco señala que no es fácil llevarlos a cabo, pues más allá de la pasión por las alturas, también se necesitan permisos, apoyo, patrocinio y el equipo necesario, el cual llega a tener un costo muy elevado.
Otro de los temas que destacó el joven fue el trabajo en equipo, el cual señala que es pieza clave en el highline, pues asegura que la comunidad que conforma Slackline Monterrey es muy unida, lo que les ha permitido cumplir todas sus metas.
“Las cosas se fueron acomodando, hubo trabajo por parte de la comunidad, y esta semana del 11 al 13 que teníamos que montar esa línea, entre las 25 personas que participamos, se consiguió el equipo, fechas y estuvimos 14 personas los tres días, pero hubo personas que llevaban comida, víveres, agua o que ayudaban a cargar las cosas”, detalló.
Finalmente, Francisco invitó a quienes desean formar parte de esta comunidad de jóvenes, amantes de lo extremo, mismos que pueden unirse comunicándose directamente con él a través de su Instagram, Francisco González; con el líder de Slackline Monterrey, Octavio Rosas, quien se encuentra en Instagram como Jaku Ovat Azrag o en la página de Facebook de Slackline Monterrey.
“Es superdivertido salir de la rutina, aprender cosas nuevas, conocer gente nueva y expandir tus límites. Si alguien quiere practicar se pueden acercar a nosotros a través de nuestras redes sociales”, finalizó.
¿Qué es highline?
El highline es un deporte extremo que consiste en mantenerse de pie o encima de una cuerda, la cual en su mayoría de las veces se encuentra en grandes alturas. A esto se suma la realización de saltos y piruetas.
A diferencia del slackline que puede realizarse en parques con tan solo cinco centímetros de distancia, el highline es característico por realizarse en puentes, montañas y cañones, desafiando los peligros de caer al vacío.
KM